¿Cómo está tu salud financiera? Si el presupuesto te sacude y te lleva cierta ventaja, o las preocupaciones por el dinero aumentan el estrés en tu vida, un chequeo anual para evaluar tu situación financiera y comenzar a poner tus finanzas familiares en orden puede ser un buen comienzo.
Para hacerte responsable de tu propia salud, los expertos aconsejan "conocer tus números", algo así como cuando los doctores nos recomiendan checar la presión sanguínea, colesterol, azúcar en la sangre y el índice de masa corporal; y que los comparemos con los valores normales de salud para que nos hagamos cargo de nuestra propia salud.
Además, es importante que revises algunas estadísticas vitales para darte cuenta de qué áreas pueden necesitar atención:
- ¿Gastas más de lo que ganas?
- ¿Gastas no más del 15 al 25% de tu ingreso neto cada mes para hacer pagos de créditos que incluyan cuentas de automóvil, tarjetas de crédito y demás, excepto el pago de tu casa?
- ¿Tienes un fondo de ahorro con, por lo menos, 3 veces lo que ganas para casos de emergencia?
Si tu respuesta es SI a todo, entonces ¡tus finanzas deberían estar en excelente estado! Por el contrario, si tu respuesta fue NO a alguna de estas preguntas, o si no lo sabes con exactitud, entonces te sugiero que realices algunos ejercicios de manejo del dinero.
Ejercicio 1: Identifica tu ingreso
Mucha gente considera que su único ingreso es su sueldo, sin embargo también se debe tomar en cuenta todo pago mensual que provenga de rentas de apartamentos, de negocios (si, hasta el de las kekas o las pulseritas que se venden en la escuela), de algunas acciones que nos dejan dividendos e intereses, y hasta de la pensión por viudez u otros. En fin, todo lo que ponga dinero en tu bolsillo es un ingreso, ¡ANOTALO!
Ejercicio 2: Haz una lista de tus deudas
Escribe cada cuenta pendiente y de crédito con su correspondiente pago mensual. Aqui no olvides incluir la cuenta de tu auto, de tus preciosas tarjetas de crédito, todos los préstamos (el de tu casa no, pero el de tu amiga querida sí). Al final, súmalos.
Si quieres saber si estás hasta el cuello de deudas, suma el total de los pagos mensuales y divide por tu ingreso mensual, si el resultado es mayor del 0.20 (20%) es tiempo de encontrar formas para reducir esos compromisos.
Ejercicio 3: Lleva cuenta de todos tus gastos
Tiempo de hacer una lista de tus gastos fijos, aqui si entra el pago de la hipoteca o alquiler de la vivienda y otros pagos de créditos, también incluye cuánto gastas en despensa, gasolina, servicios. Eso es fácil. Los gastos fijos por lo general son los mismos cada mes y son difíciles de controlar si no pones interés.
Los famosos gastos flexibles o variables, como su nombre lo indica, cambian cada mes. Para seguirle la pista a tus gastos diarios te recomiendo usar una pequeña libreta donde anotes cada centavo que gastas al día. ¡Este ejercicio te abrirá los ojos!
Te sorprenderá saber cuánto gastas en refrescos, chicles, bocadillos, comidas fuera de casa, café de Starbucks, cigarrillos, y demás caprichitos.
Ejercicio 4: Calcula tus gastos periódicos
Los gastos periódicos que pagas una o dos veces al año pueden desbalancear tu presupuesto si no los contemplas con anticipación. Piensa en un año y haz una lista de aquello que necesites comprar por mes.
Recuerda anotar regalos, ropa para la escuela, cuotas, subscripciones, entradas, tenencia, vacaciones, días de puente, celebraciones como bautizos, cumpleaños, graduaciones, babyshowers, etc.
La mayoría de los gastos inesperados no son sorpresas, pero como no son pago regulares quizá no estés listo para los mismos. Considera en esta categoría reparaciones de auto, de tu casa; visitas al doctor, sobre todo si tienes hijos; y cualquier otra emergencia.
Suma todos estos gastos para tener un total anual y divide entre 12, el resultado es lo que necesitas ahorrar cada mes para cubrir estos gastos periódicos que no se incluyen en los gastos mensuales.
Ejercicio 5: Compara tu ingreso con tus gastos
Como lo dice el título compara, si gastas menos de lo que ganas, debes tener dinero ahorrado para un día lluvioso y para objetivos a futuro. ¡Estrellita para ti!
Si te das cuenta que gastas más de lo que ganas, tienes dos opciones:
- Reduce tus gastos
- Aumenta tus ingresos
Crees que es imposible, de corazón te digo que vengas a una sesión de Cashflow para conocer cómo se mueve el dinero cuando tu pensamiento es de ricos.
Existe el método del sobre con el que puedes controlar los gastos flexibles. Necesitarás varios sobres. En cada uno coloca la cantidad de efectivo que puedes gastar en cada categoría. Cuando el sobre esté vacío es hora de dejar de gastar.
Con estos ejercicios ya tienes una buena idea sobre cuál fue tu ingreso y tus gastos en el pasado, ahora estás listo para preparar un plan de gastos futuros.
Ejercicio 6: Compara tus gastos con tus ahorros
En general, los mexicanos no tienen ningún tipo de ahorro y muchas familias están al borde de la quiebra. ¿Cómo está tu cuenta de ahorros en comparación con los gastos de los ejercicios 5 y 6?
Si no tienes ahorros comienza con la cantidad que requieres cubrir para gastos periódicos cada mes, luego ahorra realmente para las emergencias hasta que tengas una reserva que cubra 3 meses de gastos.
Probablemente pienses que no quieres hacer esto todos los días, pero si lo llevas a cabo al menos una vez al mes puedes determinar el nivel de tu condición financiera.
Adaptado de Mississipi State University. Extension Service.
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